Casa del artista Galería 2019

Los actos de allanar, esterilizar y neutralizar los espacios habitables que pululan a mi alrededor y dentro de mí, articulan una danza demoníaca y un movimiento constante entre la observación penetrante y el cerrar los ojos, entre lo sagrado y lo profano, el contacto y la fuga, la alegría y el dolor, la vida y la muerte.